¿Alguna vez has oído hablar de los préstamos a fondo perdido? Seguro que sí, ya que cada vez más personas y empresas los están utilizando. Pero… ¿sabes realmente en qué consisten? En este artículo intentaremos satisfacer toda tu curiosidad al respecto. ¡Sigue leyendo!
Préstamos a fondo perdido: qué son y cómo funcionan
En primer lugar, hay que decir que un préstamo a fondo perdido no es un préstamo al uso. Se trata de un subsidio otorgado por el gobierno y que se brinda a personas físicas o morales, emprendedores, pymes o a través de concursos. La finalidad es impulsar el crecimiento económico del país, por lo que no se exige que el beneficiario devuelva el capital ni pague intereses.
Todos estos aspectos los convierten en productos financieros muy interesantes para aquellas personas que no cuentan con los recursos necesarios para iniciar su propio negocio y que, por tanto, necesitan de una financiación externa para poder hacerlo realidad.
Cabe destacar que este tipo de ayudas pueden ser concedidas por el gobierno o por entidades privadas. Los primeros suelen ser más fáciles de obtener, ya que las condiciones de financiación suelen ser más favorables para los solicitantes. No obstante, también es cierto que las entidades privadas ofrecen este tipo de préstamos con más frecuencia que el Estado.
¿Cómo se consiguen los préstamos a fondo perdido?
¿Estás pensando en solicitar un préstamo a fondo perdido? Si es así, muy probablemente te estés preguntando cómo se consiguen estos préstamos tan ventajosos. Pues bien, para ello deberás solicitarlo a una entidad pública o privada que conceda este tipo de préstamos. En el caso de las entidades públicas, será el Estado el que conceda la ayuda. Mientras que en el caso de las entidades privadas serán los bancos o inversores privados los que se encarguen de esta tarea.
En cualquier caso, para conseguir estos préstamos es necesario cumplir una serie de requisitos. Y, sobre todo, presentar un proyecto de lo que se va a financiar. En él, deberás explicar de manera detallada en qué consiste la iniciativa que vas a desarrollar y cuánto dinero necesitas para hacerla realidad.
La solicitud de financiación que elabores debe ir acompañada también de un business plan en el que recojas información relativa al modelo de negocio, el plan de marketing, el plan de financiación y el plan de operaciones. Toda esta información es importante para que la entidad que va a concederte el préstamo tome una decisión al respecto.
Una vez se evalúe tu solicitud, te dirán si has sido aceptado o no. En caso de que aceptade, te informarán de las condiciones del préstamo y de los pasos a seguir para formalizarlo. De este modo, podrás empezar a llevar a cabo tu ansiado proyecto.
Y si una vez usado el dinero, ¿la empresa fracasa? Esta es una situación que puede darse. No obstante, como no tienes la obligación de devolver el dinero prestado, podrás estar tranquilo en ese aspecto. Sin lugar a dudas, se trata de una de las grandes ventajas por las que este tipo de préstamos son tan populares.
Si rechazan el préstamo, no te desanimes. Si crees que tu proyecto tiene el potencial suficiente, puedes presentar tu solicitud en otras entidades o bien buscar otras fuentes de financiación.
Tipos de préstamos a fondo perdido
En función del tipo de subvención que solicitamos y la actividad a la que irá orientada, encontramos una serie de préstamos a fondo perdido:
- Préstamos al capital. Estos préstamos se destinan a financiar inversiones.
- Préstamos a la explotación. Estos van dirigidos a los gastos corrientes de la empresa.
Cómo solicitar uno para emprendedores
Los préstamos a fondo perdido se caracterizan por tener unos requisitos más estrictos que otras fuentes de financiación. Por lo que, para ayudarte a lograr que tu startup despegue, aquí tienes los pasos para solicitar un préstamo a fondo perdido:
- Define exhaustivamente el tipo de proyecto o empresa que vas a poner en marcha.
- Revisa las opciones disponibles en las convocatorias de ayuntamientos, comunidades autónomas y organismos públicos.
- Solicita siempre la subvención a través de los canales oficiales.
- Asegúrate de preparar la documentación requerida con tiempo.
- Comprueba que cumples los requisitos fiscales que se solicitan como el estar al corriente de pagos con Hacienda.