Seguro que lo has escuchado en alguna parte. Y es que se ha convertido en un método de financiación recurrente al que muchos acuden a la hora de empezar un proyecto. Desde Dineo, queremos explicarte qué es el crowdfunding en detalle y cuáles son las mejores plataformas que puedes usar para iniciar el proceso.
¿Qué es el crowdfunding y para qué sirve?
El crowdfunding o micromecenazgo, es un método de financiación colectiva que permite a emprendedores y organizaciones recaudar fondos para sus proyectos a través de pequeñas contribuciones de un gran número de personas, generalmente utilizando plataformas en línea. Este sistema se basa en la cooperación y el apoyo de la comunidad, permitiendo que ideas innovadoras y proyectos creativos vean la luz sin necesidad de recurrir a los métodos tradicionales de financiación.
El crowdfunding sirve para llevar a cavo una amplia variedad de proyectos entre los que destacan:
- La financiación de proyectos creativos y artísticos como películas, música, libros y juegos.
- Para el lanzamiento de nuevos productos y tecnologías.
- Proyectos comunitarios y sociales. Como la construcción de infraestructura comunitaria o la financiación de iniciativas benéficas.
- Como apoyo para empresas emergentes y startups en su primera etapa.
¿Quiénes intervienen en un proceso de crowdfunding?
En un proceso de crowdfunding, intervienen varios actores clave que desempeñan roles esenciales para el éxito de la campaña:
- El creador del proyecto. Es la persona o entidad que propone la idea o proyecto y busca financiamiento. El creador es responsable de diseñar la campaña, establecer metas de financiación, y comunicar su propuesta de valor a los potenciales financiadores.
- Los patrocinadores o mecenas. Son las personas que aportan dinero al proyecto. Estos pueden ser individuos interesados en el proyecto, seguidores de la causa, o incluso inversores que ven potencial en la idea.
- La plataforma de crowdfunding. Actúa como intermediaria entre los creadores de proyectos y los patrocinadores. Proporciona el espacio en línea donde se puede presentar el proyecto, gestionar las contribuciones y mantener la comunicación entre ambas partes. Ejemplos de estas plataformas incluyen Kickstarter, Indiegogo y Verkami.
Cada uno de estos actores tiene un papel fundamental en el desarrollo y éxito del crowdfunding, desde la concepción de la idea hasta la obtención del financiamiento necesario.
Tipos de crowdfunding
El crowdfunding puede clasificarse en varios tipos, cada uno con sus características y objetivos específicos:
- Crowdfunding de recompensas
En este tipo, los patrocinadores reciben una recompensa a cambio de su contribución. Las recompensas pueden variar desde una mención en el proyecto hasta la entrega anticipada del producto financiado.
- Crowdfunding de donaciones
En el crowdfunding de donaciones, los patrocinadores contribuyen sin esperar una compensación financiera o material a cambio. Este tipo es común en causas benéficas, proyectos comunitarios y esfuerzos de ayuda humanitaria.
- Crowdfunding de inversión (equity crowdfunding)
Aquí, los patrocinadores invierten dinero en un proyecto o empresa a cambio de acciones o participación en el capital. Este tipo de crowdfunding es popular entre startups que buscan financiamiento sin recurrir a fondos de capital riesgo tradicionales.
- Crowdfunding de préstamos (crowdlending)
En este modelo, los patrocinadores prestan dinero al creador del proyecto, quien se compromete a devolverlo con intereses en un plazo determinado. Es una alternativa a los préstamos bancarios tradicionales y puede ser atractivo para pequeñas empresas y emprendedores.
Ventajas y desventajas del crowdfunding para empezar un proyecto
Además de la ventaja de conseguir dinero con el financiar tu proyecto de una forma alternativa, el crowdfunding destaca por:
- Acceso a financiamiento sin intermediarios. Permite a los creadores obtener fondos directamente del público sin necesidad de pasar por instituciones financieras.
- Validación de mercado. Ayuda a los emprendedores a medir el interés y la demanda del mercado antes de la producción en masa.
- Marketing y exposición. Las campañas de crowdfunding pueden aumentar la visibilidad del proyecto y atraer a una audiencia global.
- Fidelización y comunidad. Crea una base de seguidores y patrocinadores que apoyan activamente el proyecto y pueden convertirse en clientes leales.
No obstante, no todo es perfecto. Y este sistema tiene una serie de peculiaridades que viene bien tener en cuenta antes de tomar decisiones:
- Competencia y saturación. La popularidad del crowdfunding ha llevado a una alta competencia en las plataformas, haciendo difícil destacarse.
- Incertidumbre en la recaudación. No hay garantía de que se alcanzará el objetivo de financiación, lo que puede resultar en proyectos inacabados.
- Costos y comisiones. Las plataformas suelen cobrar comisiones sobre el dinero recaudado, lo que puede reducir los fondos disponibles para el proyecto.
- Responsabilidad y cumplimiento. Los creadores deben cumplir con las promesas hechas a los patrocinadores, lo que puede ser desafiante si surgen problemas imprevistos.
Principales páginas de crowdfunding
Existen numerosas plataformas de crowdfunding que han ganado reconocimiento por su efectividad y alcance global. Algunas de las más conocidas incluyen:
- Kickstarter. Una de las plataformas más populares y utilizadas en el mundo. Se enfoca principalmente en proyectos creativos y tecnológicos.
- Indiegogo. Similar a Kickstarter, pero con más flexibilidad en términos de objetivos de financiación y tipos de proyectos.
- Verkami. Popular en España y enfocada en proyectos culturales y creativos, permitiendo a los artistas y creadores conectar con su audiencia local.
- GoFundMe. Conocida por su enfoque en causas personales y benéficas, permitiendo a las personas recaudar dinero para necesidades urgentes y comunitarias.
- Seedrs. Una plataforma de equity crowdfunding que permite a los inversores comprar acciones de startups y empresas emergentes.
Estas plataformas ofrecen diferentes ventajas y enfoques, adaptándose a las diversas necesidades de los creadores de proyectos.
