La vuelta de las vacaciones siempre supone un exceso de gastos y, a veces, caprichos innecesarios. La vuelta a la rutina trae consigo la promesa de ahorrar al volver de vacaciones…., pero también nuevos gastos: libros de texto, ropa nueva, material escolar… Además, después de unas semanas de gastar más de la cuenta, no siempre tienes dinero suficiente para abarcarlo todo. En este artículo te daremos algunos consejos para que tu vuelta a la rutina sea más sencilla.
¿Ahorrar al volver de vacaciones? ¡Es posible!
A continuación, vamos a ofrecerte algunos trucos para que las facturas de las compras tras las vacaciones no sean tan elevadas y conseguir ahorrar al volver de vacaciones. Algunos gastos son inevitables, pero ¿seguro que no puedes recortar en algo?
Organiza tus gastos
Muchos de los gastos que tienes previstos los conocerás de antemano. Lleva una pequeña contabilidad que te permita organizarte. Con los ingresos que tengas disponibles y las compras que hayas apuntado te harás una idea de cuánto vas a tener que invertir antes de la llegada del otoño.
Elimina aquello de lo que puedes prescindir
Suscripciones a servicios multimedia, paquetes de televisión e internet demasiado caros o ropa de marca. Puede que te veas reflejado si estás pagando por este tipo de productos y servicios. La realidad es que dispones de un gran margen para controlar lo que gastas.
Muchas de las suscripciones a las que estamos tan habituados no se usan de forma diaria. Al contrario, cada vez tendemos más a ver las series del tirón, dejando de lado durante algún tiempo el resto de servicios. Si te suscribes a Amazon, Netflix y HBO cada mes puedes necesitar hasta 340 euros al año. Sin embargo, si vas intercalando entre las distintas plataformas, la cantidad total se quedará alrededor de los 112 euros. Ahorrarás algo más del 60%, ¡y seguirás teniendo entretenimiento de sobra! Aprovecha este periodo tras las vacaciones para organizar tus servicios.
Algo parecido ocurre con los servicios de Internet y telefonía. Tras las vacaciones, las principales compañías aprovechan para lanzar sus mejores ofertas. Encuentra la que más te guste y comienza a pagar menos por tus telecomunicaciones. No te centres en lo que te ofrecen, sino únicamente en aquello que de verdad necesitas. ¿Para que quieres llamadas ilimitadas si apenas usas el móvil? ¿De verdad necesitas la fibra óptica más rápida para ver tus películas favoritas en streaming? Ten todo eso en consideración y podrás ahorrar mucho dinero.
¿Te gusta vestir bien? Hay muchas formas de conseguir la ropa que te gusta sin necesidad de pagar por su precio de lanzamiento. Durante todo el verano las tiendas tienen prendas en rebajas. Date un paseo por el centro comercial para buscar lo que más te guste. Si todavía quieres ir un paso más allá, los principales fabricantes y varias cadenas comerciales disponen de outlets. En estas tiendas encontrarás ropa de temporadas anteriores o a punto de ser descatalogada con descuentos de hasta el 90%.
La compra mejor si es de marca blanca
A la hora de comprar tus bienes de primera necesidad, existen diferencias realmente elevadas entre diferentes supermercados. Busca los catálogos, selecciona los más baratos y cíñete a los productos en oferta. Podrás ahorrar mucho dinero únicamente con esta práctica. Además, por norma general, tanto la fruta como la carne y el pescado tienen mejores precios en las tiendas especializadas que puedes encontrar en cualquier barrio. Perderás un poco de comodidad, pero ayudarás al comercio local y tu bolsillo lo agradecerá.
Si eres socio de algún supermercado, es hora de que aproveches al máximo las posibilidades que te ofrecen por tu fidelidad. Cupones descuento, acumulación de saldo para futuras compra o descuentos exclusivos para socios son solo algunos de los beneficios de los que puedes disfrutar. Si quieres conocer todos los trucos para pagar menos por tu compra, echa un vistazo a este artículo.
Suministros del hogar
La tarifa de agua que tu ayuntamiento no puedes cambiarla, lo que sí está en tu mano es hacer un buen uso para pagar menos. En algunas ciudades los precios por el suministro de agua son realmente prohibitivos, cualquier ahorro será bienvenido. Puedes empezar por sustituir el baño por una ducha. Hasta 150 litros de diferencia por persona dejarás de consumir. Además, acortar el tiempo de tus duchas es otra solución. Un gesto tan simple como cerrar el grifo mientras te enjabonas reduce casi a un 50 % el consumo de agua.
Con la electricidad ocurre algo diferente, ya que aquí sí puedes elegir con quien contratas el servicio. Si puedes beneficiarte del bono social de la luz, la tarifa regulada es una gran opción. En caso contrario, hay multitud de páginas en Internet para comparar las tarifas más económicas. La diferencia de precios entre distintas compañías puede ser de más del doble. Además, ahorrar luz es bastante sencillo. Evita dejar en stand by tus aparatos, compra equipos de bajo consumo y sustituye las bombillas por unas con tecnología led.
Por último, cambia tus rutinas diarias y establece unas más amigables con el medioambiente. Ventila la casa en vez de usar el aire o aprovecha la luz natural en lugar de la artificial, entre otras prácticas para mantener tu casa fresca.
Piensa 2 veces antes de comprar algo
¿Has tenido alguna vez el impulso de comprarte algo que acabas de ver? Si algo así te sucede, piensa si realmente lo necesitas. Toma tu tiempo para comparar otras opciones en diferentes tiendas y descubre si merece la pena el producto. En la mayoría de ocasiones, una vez pasen esas ansias iniciales, no tendrás necesidad de comprar nada y ahorrarás el importe para otras cosas de mayor importancia.
Ahora ya has visto como reducir tus listas de gastos. Con estos sencillos trucos las semanas después de que vuelvas de vacaciones se harán mucho más llevaderas. Día a día puedes ir haciendo pequeños gestos que hagan aumentar los números de tu cuenta del banco. A fin de cuentas, así podrás ahorrar para tus próximas vacaciones. ¿Ya has elegido el destino? Te damos un último consejo. Hazlo con antelación para encontrar los mejores precios.
