La jubilación parcial es una opción cada vez más valorada por los trabajadores en España que desean reducir su jornada laboral antes de retirarse por completo. Permite compatibilizar el cobro de una parte de la pensión con un puesto de trabajo. Pero, ¿cuáles son los requisitos para acceder a esta modalidad? ¿Qué tipos existen y cuáles son sus beneficios y limitaciones? ¡Te lo contamos todo!
Y si quieres saber más acerca de la jubilación en España, esto es para ti:
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¿Qué es la jubilación parcial?
La jubilación parcial es un tipo de jubilación que permite a los trabajadores acceder a una pensión mientras continúan desempeñando su actividad laboral con una reducción de jornada. Su objetivo principal es favorecer la transición hacia la jubilación completa de manera gradual, permitiendo a la vez la contratación de nuevos trabajadores en sustitución de quienes acceden a esta modalidad.
Esta jubilación puede realizarse con o sin contrato de relevo, dependiendo del tipo de actividad y las necesidades de la empresa.
¿Qué tipos de jubilación parcial se pueden dar?
Existen diferentes tipos de jubilación parcial en función de la edad del trabajador, el contrato de relevo y el porcentaje de jornada reducida.
Jubilación parcial con contrato de relevo
Este tipo de jubilación parcial implica que la empresa contrate a un trabajador que releve parcialmente al empleado que se jubila. Para ello, se deben cumplir ciertos requisitos, como un mínimo de años cotizados y la reducción de jornada dentro de los márgenes permitidos por la legislación vigente.
Jubilación parcial sin contrato de relevo
En este caso, la empresa no está obligada a contratar a un trabajador en sustitución del jubilado parcial. Sin embargo, las condiciones de acceso suelen ser más restrictivas y la reducción de jornada permitida es menor que en la modalidad con relevo.
Solicitud de la jubilación parcial, ¿cómo se realiza?
Para solicitar la jubilación parcial en 2025, es necesario seguir una serie de pasos administrativos:
- Verificar el cumplimiento de requisitos: Es imprescindible comprobar que se cumplen los criterios de edad, cotización y jornada laboral exigidos.
- Comunicación a la empresa: Se debe negociar con el empleador la reducción de jornada y, en su caso, la firma del contrato de relevo.
- Presentación de la solicitud ante la Seguridad Social: La solicitud debe realizarse a través de la Sede Electrónica de la Seguridad Social o en los centros de atención presencial.
- Aportación de la documentación requerida: Incluye el DNI, vida laboral, certificado de empresa y otros documentos específicos según el caso.
¿Cuánto se pierde en la jubilación parcial?
Uno de los aspectos más importantes a considerar es el impacto económico de la jubilación parcial en la pensión. Al reducirse la jornada laboral, el salario también se ve reducido proporcionalmente. Sin embargo, la pensión de jubilación parcial compensa parte de esta pérdida de ingresos.
Además, hay que tener en cuenta que las bases de cotización se ven afectadas, lo que puede repercutir en el cálculo de la pensión completa al momento de la jubilación total.
¿Quién puede acceder a la jubilación parcial?
La jubilación parcial no está disponible para todos los trabajadores. Los requisitos varían según el régimen de la Seguridad Social al que se esté adscrito, pero en términos generales, los principales criterios son:
- Edad mínima exigida, que varía dependiendo del contrato de relevo y los años cotizados.
- Años de cotización mínimos, con diferencias en función del tipo de jubilación parcial solicitada.
- Acuerdo con la empresa, ya que la reducción de jornada debe ser pactada con el empleador.
¿Cuántos años tengo que tener cotizados para la jubilación parcial?
El número de años cotizados necesarios para acceder a la jubilación parcial depende de la modalidad elegida:
- Jubilación parcial con contrato de relevo: Se exige un mínimo de 33 años cotizados en términos generales, aunque hay excepciones para personas con discapacidad.
- Jubilación parcial sin contrato de relevo: En este caso, los requisitos de cotización suelen ser más exigentes, llegando hasta los 36 años y 6 meses en algunos supuestos.
